¡Ojalá hubiera tenido esto en cuenta antes de hacer el vuelo! Esta es una frase que se repite con frecuencia y que añade un estrés innecesario a vuestro trabajo como proveedores de servicios con drones. En este post, Aerial Insights, os da varias pistas sobre cómo evitarlo y mejorar los resultados de vuestros trabajos.

Nuestro trabajo nos ha permitido procesar multitud de ortofotos, índices de vigor y reconstrucciones 3d. Es por eso que hemos detectado unos pocos errores que se repiten de forma consistente. En general, cuanto mejor sea el trabajo previo del piloto, mejores serán los resultados que os entregaremos y que vuestro cliente disfrutará.

El TOP 6 de los errores más frecuentes está asociado a variables que podemos controlar incluso antes de comenzar el vuelo. Si conseguís eliminar incertidumbre en estos puntos, prácticamente tenéis asegurado el éxito de vuestro trabajo. Esta semana hablaremos de los tres primeros: la elección del drone/cámara, trayectoria de vuelo y solape entre imágenes. La semana que viene trataremos: tipos de resultados, resolución/precisión esperada, puntos de control (link).

Elección del tipo de drone / cámara

Existen varios tipos de drones en el mercado pero, sin duda, los drones de ala fija y los multirrotores son los drones más utilizados.

Los drones de ala fija son recomendables para cubrir extensiones por encima de unas pocas decenas de hectáreas. Su gran autonomía de vuelo, en muchos casos cercana a la hora, y su mayor velocidad de crucero los hace ideales para cubrir grandes cultivos, estructuras lineales y carreteras, etc.

Por otro lado, los multirrotores son más recomendables para mapear extensiones más reducidas. Lo habitual es que sus baterías sean suficientes para vuelos de 20-30 minutos. En muchos casos será suficiente, en otros, siempre es posible completar varios vuelos y Aerial Insights se encargará de mezclar las imágenes en un único resultado.

Si esperáis condiciones de viento fuerte, un multirotor con gimbal os dará más estabilidad en las imágenes, al coste de tener que planificar vuelos algo más cortos. Los alas fijas, sobre todo las de menor peso, suelen ser más sensibles a viento racheado.

¡Importante! Hay cámaras que no son adecuadas para ciertos trabajos. Por ejemplo, no es posible calcular índices de vigor agrícolas (ej, NDVI, SAVI…) con cámaras RGB. Para ellos son necesarias cámaras mutiespectrales. igualmente si queremos capturar imágenes termográficas necesitaremos que nuestra aeronave embarque una cámara termgráfica.

Trayectoria de vuelo

Este es uno de los puntos más importantes. La trayectoria de vuelo será ligeramente diferente en función del tipo de resultado que esperéis y el terreno/estructura que intentéis reconstruir. Así, nada tiene que ver la trayectoria de vuelo para generar una ortofoto que la trayectoria de vuelo para generar un volumen 3d.

Hay tres tipos de trayectorias que resolverán la mayoría de los casos:

  • Trayectoria de cuadrícula: es el tipo de trayectoria ideal para generar ortofotos de zonas esencialmente planas. Sigue un patrón de líneas paralelas hasta cubrir toda la superficie.

trayectoria de drone para ortofoto

  • Trayectoria de doble cuadrícula: este tipo de trayectoria es similar a la trayectoria de cuadrícula pero realizando una segunda pasada a 90º. Resulta útil cuando la orografía es algo más complicada (cañones, vaguadas, canteras, etc).

trayectoria de drone para reconstrucciones 2d y 3d

  • Trayectorias circulares: este tipo de trayectorias son necesarias para poder reconstruir volúmenes 3d de edificios o estructuras verticales. Con ellas es posible mover una cámara virtual alrededor del objeto de interés.

trayectoria de drone para volumen 3d

Otro aspecto importante es el ángulo de las trayectorias. El vuelo debe generar un número suficiente de imágenes con puntos de vista alternativos de un mismo elemento, y reducir las zonas ciegas. Podéis encontrar información muy detallada en este post.

Finalmente, en caso de que ninguna de las anteriores se ajuste a vuestro caso, sed creativos y pensad en utilizar alternativas, combinación de varios vuelos y trayectorias, etc.

Solape de imágenes

Hay que tener claro que para que un detalle sea fielmente reconstruido, es necesario que aparezca en un número mínimo de fotografías. Esto se traduce en solape longitudinal y transversal entre una imagen y la anterior/siguiente.

Un solape insuficiente tenderá a generar huecos en la ortofoto, roturas y discontinuidades que serán visibles a simple vista. Por el contrario, no es cierto que a mayor solape se consiga mejor precisión en el resultado. En la mayoría de ocasiones, esto solo consigue aumentar los costes de procesado y extender los tiempos de entrega.

Como regla general, recomendamos solapes (aproximados) del 70-80% frontal y del 60-70% lateral. La mayoría de softwares de planificación te permitirán incluir este dato como parámetro.

En el caso de volúmenes 3D, el solape es algo más difícil de calcular. En todo caso, como ejemplo, una estructura similar a un edificio requerirá varias trayectorias circulares a varias alturas. Las imágenes generadas para una altura en concreto deben solaparse con las alturas superiores/inferiores. Cada órbita debe generar una foto cada 5-10 grados, es decir, entre 40 y 80 fotos.

Como veis son errores que se pueden evitar realizando una buena planificación de vuelo. Nos vemos la semana que viene con la segunda parte del artículo (tipos de resultados, resolución/precisión esperada, puntos de control). Mientras tanto si tenéis dudas podéis contactarnos en info@aerial-insights.co.

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